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Josep Arenas / Comunicación Social

Inmigración, paciencia y humildad

El mes acaba de empezar. Me refiero al noveno mes lunar del calendario islámico, el ramadán, que empezó ayer, miércoles, y finaliza el 10 de septiembre. Durante este periodo los fieles al Islam se disponen a realizar el ayuno, desde antes del alba hasta la puesta de sol. Paciencia y humildad son dos virtudes que cultivan los mahometanos durante estas jornadas, que coinciden este año con la canícula. La mayor parte de ellos, en España, son extranjeros con cuyas costumbres,  prácticas y cultura convivimos.

Los extranjeros, en general, vienen a cubrir una necesidad y por ello contribuyen aportando aspectos positivos con su integración cultural, social y laboral. Muchos puestos de trabajo son cubiertos por extranjeros, porque los propios originarios los rechazaron antes, a pesar del alto índice de paro. Pensemos en las cuidadoras de las personas mayores  -las porque los cuidadores sólo alcanzan el 0,6 por cien-, o en los recolectores de fruta de Lleida,  o en  los vendimiadores de la ribera del Sil. Por ejemplo.

Por otra parte, nuestra temible curva demográfica desemboca en el envejecimiento. Por fortuna, sólo la inmigración la viene corrigiendo parcialmente. “Necesitamos una generación de recambio”, me exclamaba recientemente un camarero de Carnota (A Coruña), mientras lamentaba el envejecimiento preocupante de la Galicia interior, donde las personas mayores son ya más de la mitad de la población en algunos municipios.

Cierto es que la transformación que han sufrido algunas ciudades y barrios, donde en sólo una década la población inmigrante ha crecido espectacularmente, ha comportado grandes retos. Ejemplos así han generado una gran creatividad para la integración social: desde la creación de lugares de culto o cementerios multiusos para diferentes creencias, hasta la celebración de fiestas multiétnicas o el despegue de iniciativas de alfabetización y de oferta de información sobre derechos y servicios en distintos idiomas.

Recordemos que el número de extranjeros con tarjeta de residencia en España se eleva a la nada desdeñable cifra de 4,74 millones.  La población extranjera alcanza el 12%.  Por vez primera, en este primer semestre, el número de extranjeros residentes con permiso ha disminuido en 100.000 personas. De ellos 758.900 son marroquíes, si bien los rumanos han pasado a ocupar el primer puesto con 793.205 personas. Ecuador, Colombia y el Reino Unido son los siguientes países de origen.

En cualquier caso, como siempre ha sucedido en este bendito país, la inmigración deberá recorrer el proceso de la integración. Creo acertado abordarla como fuente de  oportunidades más que de problemas. A pesar de los conflictos, siempre inevitables,  las soluciones surgen cuando volvemos a los orígenes: la defensa de los derechos humanos, considerando a la persona, no como un medio, sino como un fin en si mismo, sujeto de derechos.  Las soluciones surgen cuando socialmente somos capaces de rechazar iniciativas xenófobas o leyes racistas, como la que recientemente han tratado de aprobar en Arizona (EEUU).

O, en todo caso, como enseña el Ramadán, abordando los conflictos con paciencia y humildad.

Josep Arenas

 

3 comentarios

Argent -

Este mes ha empezado el Ramadán. Los fieles del Islam comienzan el ayuno hasta el 10 de septiembre como muy bien describe el autor. Me acuerdo de un jugador de fútbol profesional de primera división al que a pesar de que el entrenador le facilitaba el horario de entrenamiento, él, consciente de sus principios, desde antes que saliera el sol hasta su puesta, guardaba el ayuno. He escuchado a muchos que creen ser católicos y les cuesta enormemente, por cuaresma, hacer los viernes ayuno y abstinencia.
Cuestión de principios y convicciones.
Realmente necesitamos una generación de cambio. En dónde vivo son innumerables las personas de avanzada edad que son atendidas por mujeres de inmigración porque las de aquí no quieren hacerlo por miedo al qué dirán. Pues, bienvenidas. Felicito al autor por informarnos con tal precisión del número de extranjeros que tenemos en España, y, al ser tan bien detallado, al mostrarnos la información de su origen, verdaderamente son cifras que te hacen meditar.
¿Que éstas personas no se integran? Hay de todo, como en la viña del Señor. También es cierto que algunos de nosotros no damos precisamente las facilidades que necesitan para su integración. Como dice el autor, inmigración, paciencia y humildad. Por mi parte intentaré hacerlo.
A Comunicación Social le animo a que siga con sus reflexiones y nos mantenga en la actualidad con sus observaciones y opiniones.

violeta -

La lectura de este artículo se merece un momento de reflexión. No es un tema nada fácil, sobretodo visto desde una comunidad autónoma en la que todavía la inmigración no es un problema. Es fácil decir que estamos abiertos a la multiculturalidad, como es mi caso. Me encanta ver las aulas de los colegios llenas de niños de diferentes países y pienso en la riqueza cultural que representa para. Nos queda saber aprender efectivamente con "paciencia y humildad" y abrirnos a esta borrachera multicultural.

Anónimo -

Saludos desde el país vecino que pronto te acogerá de nuevo! petons