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Josep Arenas / Comunicación Social

Mujeres, de la ficción a la realidad

Proponemos una serie de personajes, todos femeninos, más propios de la novela que pertenecientes a la realidad, en esta semana en la que Mario Vargas Llosa recibe el Nobel de Literatura.

Se trata de mujeres que tienen profesiones que son ejercidas de forma muy mayoritaria por hombres. Son personajes verosímiles. Pero a la vez muy infrecuentes, en nuestra sociedad.

Referiremos unos cuantos. Tal vez el lector conocerá casos de profesiones como las siguientes.

Controladora aérea. Conductora jefa de tren de mercancías. Tractorista. Informática analista-programadora. Conductora de autobús. Camionera. Conductora de tranvía. Agente detective privado. Jefa de taller de reparación de coches. Secretaria general del sindicato. Presidenta de la confederación de empresarios. 

Más. Astróloga. Física. Ingeniera de fabricación. Ingeniera de planificación. Tasadora de inmuebles. Tasadora de vehículos. Capataza de operaciones portuarias. Operadora de máquina de movimiento de tierras. Oficial de la instalación de procesamiento de metales. Montadora de productos metálicos. 

Y, seguimos. Marinera de cubierta de barco. Moza de cubierta. Mecánica ajustadora de motores de avión o de helicóptero. Mecánica naval. Empleada de pompas fúnebres. Embalsamadora. Incineradora. Oficial de inhumación o exhumación. Sepulturera. Enterradora.

Todavía añadimos. Submarinista de salvamento. Submarinista soldadora. Operadora de máquina fresadora. Operadora de máquina para fabricar municiones. Operadora de máquina-herramienta.  Música. Oficial maquinista de buque mercante. Oficial maquinista de planta de incineración de residuos. Agente forestal. Peón de obras. Recogedora de basura. Barrendera. Percebera. Montadora de placas de energía solar.

La lista puede continuar. Pero cuando, en nuestra vida cotidiana, conocemos a pocos de dichos personajes femeninos, es porque nos encontramos todavía lejos de la pregonada paridad en el empleo. Lejos, de la igualdad de oportunidades en el acceso al mundo laboral. Lejos de la mayoritaria incorporación de la mujer al empleo.

Son, por lo tanto, muchas las historias y los relatos que todavía quedan por crear y escribir. Para pasar de mujeres de novela a mujeres de verdad, con plenos derechos laborales.

Para pasar de la ficción a la realidad.

Josep Arenas

5 comentarios

Josep -

Este post no se refiere a la capacidad de las mujeres de llegar a posiciones directivas. Solamente se refiere p r o f e s i o n e s en las que la mujer está subrepresentada. Para superar esta situación es necesario que la sociedad cambie. Se trata de un cambio de cultura sobre las posibilidades de realización de determinados trabajos por mujeres. Para ello los gobiernos, los sindicatos, las escuelas, las mujeres y los hombres en general deben, los primeros, proporcionar estímulos, fiscales, culturales, educativos, y personales, los últimos. Nadie tiene que redimir a nadie. Ni siquiera María tiene que redimir a los que ella llama "falsos redentores". Hay que facilitar legal y culturalmente la incorporación de la mujer al trabajo. Para ello hay que romper barreras sobre el acceso -hoy muy limitado- a determinadas profesiones y en general para el acceso de la mujer al trabajo. Y sobretodo favorecer la contratación de determinados puestos de trabajo a las mujeres, con incentivos a las empresas. Otra cosa es el acceso a cargos directivos. En primer lugar me pregunto porque no hay mujeres en determinadas profesiones.

maria -

No es ninguna ficción que poco a poco en la sociedad actual sea posible que mujeres con capacidad lleguen a posiciones directivas en el ámbito político y/ o porfesional . Todas ellas relatan situaciones de un gran esfuerzo y una dedicación superior a la que se le exigiria a cualquier hombre para estar en su lugar . Desgraciadamente su vida personal se ve muchas veces afectada por ese sobre -esfuerzo que se les exige .Tambien desgraciadamente su visibilidad social , su reconocimiento público , no siempre es compatible con el machismo de los hombres que a veces se ven excsivamente lesionados en su "ego " por el triunfo profesional de sus compañeras . Pero tambien hay hombres " Buenisimos " y " amantisisimos " que dedican una gran parte de su vida a redimir y apoyar a las mujeres de su vida . No podemos creernos ni a unos ni a otros . Nuestra visibilidad , nuestra vida , nuestro reconocimeiento como mujeres capaces requiere del cambio de muchas mentalidades masculinas , tambien las de los falsos redentores ....y tambien la de aquellos que todo lo resuleven con que cambie y avance la sociedad , nada tiene que ver con su actitud personal.......

J Joan Francesc -

Me parece muy interesante la primera aportación femenina -el comentario de Mar-. Tanto o más que el propio artículo de Josep. Así es y así debe ser. Un toque femenino simpre mejora las relaciones.

J Joan -

Está claro que este comentario, en forma de primera aportación femenina, es tanto o más interesante que el propio artículo. Así es y así debe ser. Se agradece.

Mar -

Es de agradecer un guiño al lado femenino en este blog.;))
Yo añadiría a esta lista muchos más nombres de trabajos menos "manuales" como: la presidenta del consejo de administración, la presidenta del gobierno, la primera ministra, la consejera delegada, la académica, la banquera, la gerente de empresa multinacional, la directora comercial, la rectora de universidad… ¿El mundo sigue siendo masculino?
Aún así no se pueden negar los grandísimos avances conseguidos hasta ahora, gracias a los esfuerzos de muchas mujeres anónimas, en muchos casos.
Los gobiernos ponen manos a la obra y ejercen una discriminación positiva para intentar igualar el número de hombres y de mujeres en puestos de responsabilidad. Un hecho que se hace en ocasiones, sin demasiado sentido. Sin embargo los puestos clave, siguen en su mayoría ocupados por hombres y la propaganda sigue teniendo un tono machista, por mucho que se intente evitar.
La educación es una de las claves. Necesitamos menos cuentos de príncipes y más igualdad. Aunque, claro, para enseñar es fundamental predicar con el ejemplo y los niños no perciben esta igualdad aún, ni en sus casas.
Las ayudas y el apoyo a la maternidad son fundamentales. Con la crisis y sus recortes, el futuro no es muy alentador en este sentido. Habrá que seguir consiguiendo metas pasito a pasito en el día a día.
Viva la diferencia, pero en igualdad